22 de agosto de 2010

Debate - Globalización.

Podría declararme anti globalizadora, por supuesto. No estoy de acuerdo con los postulados básicos que el autor sostiene. Principalmente porque en todos ellos niega o ignora lo que es la tradición de un país, sus raíces y sus costumbres.
Pero, ¿no sería hipócrita de mi parte, considerando que soy una participante activa más de lo que es el movimiento globalizador? Sí, yo voy, yo como de vez en cuando en McDonald’s (citando el ejemplo que los chicos pusieron varias veces); yo uso muchas de las redes sociales; voy a aprender inglés (lengua casi universal por estos tiempos) porque mis padres consideran que es importante para mi futuro; compro productos de marcas reconocidas internacionalmente y muchas veces prefiero aquellas marcas en vez de darle una oportunidad a la “Industria Argentina”. Por descontado, en este preciso momento estamos utilizando un medio de comunicación increíble que es Internet, esta Red inmensa que abre muchísimas posibilidades pero que es como el hijo directo de la globalización.
Sostengo que en realidad un problema que tenemos es la imposibilidad de comprender el concepto de todo, de todos, de mundo, de globo, de conjunto. Mejor dicho, es asombrosa la capacidad de los líderes globalizadores que tienen para engañarnos cuando nos venden, que lo que ofrecen realmente es para todos. ¿A quienes nos referimos cuando decimos “todos”? No creo que pensemos en los nenes que se mueren de sed en algún país perdido de África que ni siqueira conocemos mucho porque no nos interesa. Cuando hablamos de que la globalización pretende incluirnos a todos, por supuesto que no considera a esos nenes, ni mucho menos. No puedo evitar pensar en una especie de boca gigante que desde el norte de nuestro continente va devorando al resto de los países.
Podríamos decir a nuestro favor (a favor de nosotros, los chicos de segundo polimodal del IAF que estamos haciendo esta tarea y pensando en nuestra postura pro o anti globalización), que bueno, que no hay vuelta atrás, que es tan masivo este movimiento que el hecho que estemos debatiendo esto en un medio naturalmente globalizador como es Internet realmente no afecta mucho, que no es nuestra culpa. A estas alturas, ¿se puede pensar en un futuro sin la Red? Obviamente ningún humano puede ver el futuro, lógico, pero no me puedo imaginar un fin en lo que es este proceso globalizador. Por supuesto que lo habrá, lo sabemos, pero cuesta mucho imaginarse una retirada de los arcos amarillos de todas las ciudades medianamente importantes del mundo.
En un punto, Fernández Hermana hace referencia a que la Red sería un medio para “acabar con el cinismo letal de que los pobres (…) son tontos porque no encuentran tampoco la electricidad”. También dice que se podrían “destrozar este tipo de planteamientos”. No creo que el autor vaya a comprarle y entregarle una notebook al nene del país de áfrica que mencioné antes. Primero se necesitan cambios grandes como países, cada uno. Cambios importantes.
Nos conviene a nosotros la globalización, claro que sí. Como hace el autor, mofándonos de nuestra riqueza y de nuestras posibilidades podemos asegurar que, hasta que algo cambie, nos conviene el movimiento. Citando, “No podremos escaparnos, como hasta ahora, de ese mundo que no nos gusta echándole la culpa a los ricos, como si nosotros no formáramos parte de esa categoría”. No seremos europeos pero, a pesar de la enorme cantidad de pobres que tiene nuestro país, por lo menos contamos con agua corriente en gran parte de él, y eso, comparado, es bastante.
El problema es que la tradición, la escencia de esos países de la periferia algún día puede quedar ahogada en el medio de una fiesta de Halloween, antes que, poniendo un ejemplo, los norteamericanos se junten a tomar mate. El tercer mundo pareciera no tener chances, nuestros gobernantes no están lo suficientemente capacitados para frenar esto o simplemente no lo quieren. ¿Qué haría Cristina sin sus prendas de Dolce & Gabbana? Muchos líderes de muchos países agachan la cabeza y le dicen sí a las propuestas de las potencias centrales.
Soy anti globalizadora, pero eso no significa que no quiero ni ver una sola multinacional en el país. Lo ideal sería un control sobre sus poderes. Que no hagan lo que quieran, que no manejen cuanto deseen. Tampoco significa que esté en contra de toda organización del tipo FMI o el Banco Mundial, pero una serie de reformas que regulen su actuar y revisen sus estatutos también sería lo correcto. Las deudas externas de muchos de los países de la periferia impiden que se puedan desarrollar con algo más de libertad, estando ahogados y presionados constantemente, arrastrando la deuda a través de los años y acarriando muchísimos problemas. Que sea anti globalizadora tampoco significa que vaya a tirar mis zapatillas Converse. Me parece que lo que habría que controlar es cómo se fabrican, quién contrata al señor que prende la maquinaria que las hace, cuánto le pagan a ese señor y si puede vivir lo suficientemente bien, cubriendo sus necesidades básicas. Todo esto claramente no se aplica en la realidad que vemos hoy.
No le puedo decir que no a Internet, por supuesto. A propósito, es vital para la organización de los movimientos antiglobalizadores. Nos comunica y nos acerca a todos, cualquiera con acceso puede tener voz, sin importar que alguien lo escuche o no. Es una herramienta que, bien utilizada, puede sacarse mucho mas provecho si se incorpora realmente a todos.
Encontré que los anti globalizadores optan también por denominarse a si mismos altermundialistas. El término proviene de un discurso inaugural que se dio en Porto Alegre en el 2001 en una reunión del Foro Social Mundial (alianza de movimientos sociales de todo el mundo con tendencias antiglobalizadoras). En él, destacan sus ideas, sus convicciones y defienden que la igualdad, los derechos humanos y la justicia van por encima de las ambiciones capitalistas, destacando también que con las correctas medidas (que también detallan), existe “la esperanza de un nuevo mundo posible donde el ser humano y la naturaleza son el centro de nuestras preocupaciones”. Así, un antiglobalizador no se define sólo por oposición, si no por alternativa, otro mundo es posible.

Paloma Teseyra, Segundo b poli-

11 comentarios:

Klun, Carolina dijo...

Voy a ser sincera, cuando empece a leer el texto dije Paloma globalizadora! y me dijiste lee más; casi me sorprendo. Buenisimo el texto y lo que mas me llamo la atencion fue el:
existe “la esperanza de un nuevo mundo posible donde el ser humano y la naturaleza son el centro de nuestras preocupaciones”. Así, un antiglobalizador no se define sólo por oposición, si no por alternativa, otro mundo es posible.

Coincido con lo que mencionaste de que todos nos abastecemos de productos extranjeros y usamos internet y consumimos en mc; pero no masivamente. Con respecto a lo que yo postule no es que amo el conocidicimo " anarquismo ", estoy a favor de ciertas cosas que opinan y/o dicen, y como una persona antiglobalizadora, ellos tambien lo son y apoyo sus porque.

Paloma Teseyra dijo...

Jaja buenisimo tu comentario :)
Y lo del anarquismo lo puse medio en chiste, no te declare anarquista igual ajja gracias por la respuesta Caro !

Francisco Fraga dijo...

Que bien entendiste el texto, pudiste expresar lo que pensabas a la perfección, usando palabras totalmente tuyas y así hacerme llegar a la perfección lo que escribiste.

Yo pienso igual que vos, que hipócrita soy criticando la globalización cuando yo soy parte de ella, convivo diariamente y la disfruto se podría decir.

Buen trabajo :)

2 Polimodal dijo...

Palu! muy buena la forma de tomar tu postura estoy totalmente de acuerdo, somos parte de este mundo globalizador, nacimos ya involucrados, pero podemos tomar los beneficios que esto nos aporta para utilizarlos de manera que todos podamos sacar provecho, (cada uno cuanto pueda). Ojo, lo digo en el sentido de que bien utilizado es de mucha ayuda, para lograr ayudar a otros.
como pasa con Internet que te da la posibilidad de saber que es lo que sucede en todo el Mundo, poder acercarnos, unirnos, para enfrentar los problemas, es una buena ventaja.
Muy buen trabajo!

2 Polimodal dijo...

Soy Luly jaja

Belen Fenoglio dijo...

Palu:
Gracias a la globalizacion nos hemos podido enterar de las atrocidades que pasan personas desde siempre, en distintos puntos del planeta, momento a momento. una persona que se cree superior a otra lo esclaviza con el hambre, bajo salario, malas condiciones de trabajo. Eso tiene que cambiar pero desde la mentalidad de las personas.
Debido a la globalizacion nos hemos podido enterar de lo sucedido en puerto príncipe , HAITÍ, y desde aquí la gente pudo solidarisarce con ese pueblo sin poner fronteras.
Lo que no entiendo es cuando decís

" Principalmente porque en todos ellos niega o ignora lo que es la tradición de un país, sus raíces y sus costumbres. "

eso no se pierde si las personas están convencidas de lo que vivieron o persiguen es la verdad, Perdura para siempre.

Juli Garcia dijo...

"...eso no se pierde si las personas están convencidas de lo que vivieron o persiguen es la verdad, Perdura para siempre."

Yo pienso que a veces es dificil que eso perdure, si desde que un nene tiene conciencia mira dibujitos por televisión que hablan mas de la mitad en inglés, si de tanta información norteamericana que recibe, piensa que el es de Estados Unidos.
Está claro que uno tiene que adaptarste al mundo globalizado, o acaso todos nosotros no estudiamos o pretendemos estudiar inglés porque sabemos que es muy útil para el futuro.
Esto lo sabemos, porque tambien estamos en condiciones de deducir que si todo sigue igual, quien no sepa inglés no tendrá oportunidades, el aumento de las empresas multinacionales instaladas en paises que buscan su desarrollo llevaran a la necesidad de gente que trabaje ahi.
Esto es un ciclo, y sin duda esta circulando.

Anónimo dijo...

Con respecto al comentario de Juli, coincido pero pienso no de cierta manera, porque uno tiene que adaptarse al 20%, al mundo globalizador, y porque no ese 20% no se adapta al otro 80%?; eso desde mi punto de vista debe cambiar con nosotros, que somos los futuros de un país tan importante como Argentina; quienes en vez de sacar a flote el país cada dia lo destruimos más.

Klun, Carolina dijo...

Soy Caro!

Juli Garcia dijo...

EXACTO! me parece que esta en cada uno empezar por eso.
No creo que hasta hoy alguno de nosotros al cantar las estrofas de nuestro himno se haya sentide representado, ninguno siente esa piel de gallina que si siente cuando se ve a nuestro equipo de futbol en un mundial...
Sinceramente, hace años que no me pongo una escarapela... que no averiguo por mis medios y por mi interes datos sobre lo que se supone que es "nuestra" cultura...
Creo que a partir de este trabajoy de este debate me voy a proponer objeetivos en cuanto a esto.

Paloma Teseyra dijo...

Belu, tenés mucha razón en eso de que gracias a las ramas de la globalización podemos enterarnos de cosas que antes hubiera sido imposible. El poder de unión, en un buen sentido, es una herramienta terrible en cuanto a su alcance, se pueden lograr muchisimas cosas buenas, como lo de Haití que mencionaste.
Y lo que quise decir de las tradiciones... es algo qeu podemos ver en todos lados. ¿Quién escucha, de nosotros las nuevas generaciones, un tango o una zamba, por decir? Muuuuy pocos. Ahi vemos que lo que antes era una costumbre, ahora se está disolviendo en esta "cultura global" (no sé si me expreso bien... quiero decir que todo un conjunto de costumbres en donde algunas veces las tradiciones locales no se incorporan).
Y bueno, no puedo no estar de acuerdo con lo de Juli y Caro, el patriotismo es algo en lo que de a poquito tendriamos que empezar a pensar nosotros (ya que los grandes no estan muy interesados en promocionarnos las tradiciones de acá)